27.12.08

Hijos de la libre

El apóstol Pablo testifica que somos hijos de la promesa, hijos de la libre, porque se nos ha prometido la vida eterna a través de nuestra Madre celestial.

Gá. 4:28 『Así que, hermanos, nosotros, como Isaac, somos hijos de la promesa.』

Gá. 4:31 『De manera, hermanos, que no somos hijos de la esclava, sino de la libre.』

Si somos hijos de la libre, ¿cómo llamaremos a la libre? Debemos llamarla “Madre”.Sin recibir a la Madre celestial, no podemos tener vida eterna. La vida eterna que Dios ha prometido darnos, es dada a través de la Madre celestial.En esta última época, necesitamos a nuestra Madre Jerusalén, a quien estableció el segundo Cristo Ahnsahnghong. Creamos en Cristo Ahnsahnghong, el Espíritu Santo, y en la Madre Jerusalén, la Esposa, y recibamos la salvación.